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La cláusula suelo es una cláusula abusiva que se incluye en los contratos de préstamos hipotecarios y que limita de forma mínima el tipo de interés variable a aplicar en las hipotecas, impidiendo que los clientes se beneficien de las bajadas del Euríbor. Esta cláusula ha sido declarada nula por los tribunales en numerosas ocasiones, lo que ha permitido a los afectados reclamar la devolución de las cantidades cobradas de más.
En cuanto a la fecha desde la cual se puede reclamar la cláusula suelo, es importante tener en cuenta que existe un plazo de prescripción de 4 años desde que se produjo el último pago con la cláusula suelo. Esto significa que si el último pago con la cláusula suelo se realizó hace más de 4 años, ya no se podrá reclamar.
Sin embargo, es importante destacar que en algunos casos la jurisprudencia ha establecido que este plazo de prescripción no empieza a contar hasta que el cliente tiene conocimiento de la existencia de la cláusula suelo y de su carácter abusivo. Por lo tanto, si el cliente no tuvo conocimiento de la cláusula suelo hasta hace poco tiempo, aún podría reclamar aunque hayan pasado más de 4 años desde el último pago.
Plazo límite para reclamar cláusula de suelo
El plazo límite para reclamar una cláusula de suelo en un contrato hipotecario es de 15 años desde la firma del contrato. Esto significa que los consumidores que consideren que han sido afectados por esta cláusula abusiva tienen un periodo de 15 años para reclamar la devolución de las cantidades pagadas de más debido a dicha cláusula.
Es importante tener en cuenta que este plazo comienza a contar desde la fecha de firma del contrato de la hipoteca, por lo que es fundamental revisar la documentación para determinar si se ha sido afectado por esta cláusula y actuar dentro del plazo establecido.
En caso de que se haya detectado una cláusula de suelo abusiva, es recomendable ponerse en contacto con un abogado especializado en derecho bancario para que pueda asesorar sobre las opciones legales disponibles y los pasos a seguir para reclamar la devolución de las cantidades pagadas de más.
Descubre si puedes reclamar la cláusula suelo
La cláusula suelo es una cláusula abusiva que limita el interés mínimo que se puede aplicar en una hipoteca, lo que impide que los clientes se beneficien de las bajadas del Euribor. Para determinar si puedes reclamar la cláusula suelo, debes tener en cuenta varios factores:
1. Revisar tu escritura de hipoteca: Es importante analizar tu contrato hipotecario para identificar si contiene una cláusula suelo.
2. Fecha de firma del contrato: La cláusula suelo solo puede ser reclamada si se firmó antes de la sentencia del Tribunal Supremo de 2013 que declaraba su nulidad en determinadas circunstancias.
3. Condiciones del contrato: Debes comprobar si la cláusula suelo se encuentra en condiciones abusivas o poco transparentes, ya que esto puede ser motivo para reclamar su eliminación.
Si cumples con estos requisitos, es posible que puedas reclamar la eliminación de la cláusula suelo y la devolución de los intereses pagados de más. Es recomendable consultar con un abogado especializado en derecho bancario para que te asesore sobre tus opciones y te ayude en el proceso de reclamación.
Inicio de la cláusula suelo en España.
La cláusula suelo en España comenzó a ser utilizada por las entidades bancarias en los contratos de hipoteca a partir de finales de los años 90 y principios de los años 2000. Esta cláusula establecía un límite mínimo que debía pagar el cliente incluso cuando el tipo de interés bajaba por debajo de ese límite.
La cláusula suelo se hizo especialmente polémica durante la crisis financiera de 2008, ya que muchos hipotecados se vieron afectados al no poder beneficiarse de las rebajas en el Euríbor. Esto llevó a numerosas demandas de consumidores contra los bancos por considerar abusivas estas cláusulas.
En 2013, el Tribunal Supremo de España se pronunció sobre la cláusula suelo y declaró que era nula si no estaba debidamente explicada al cliente en el momento de la firma del contrato. Esto abrió la puerta a que muchos afectados pudieran reclamar la devolución de las cantidades indebidamente cobradas por los bancos.
Finalmente, en 2016, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea dictaminó que los bancos debían devolver todo el dinero cobrado de más por la aplicación de la cláusula suelo desde el inicio del contrato. Esto supuso un duro golpe para las entidades financieras, que tuvieron que hacer frente a numerosas reclamaciones y devoluciones.
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