Cómo conseguir despido laboral y cobrar indemnización completa: guía práctica




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Para empezar, es importante tener en cuenta que en la mayoría de los casos, el despido laboral debe estar justificado y cumplir con los requisitos legales para que sea válido. Si consideras que has sido despedido de manera injusta, es fundamental que busques asesoramiento legal para evaluar tus opciones.

En primer lugar, es importante revisar tu contrato laboral y la normativa laboral vigente en tu país para determinar si el despido ha sido válido. Si consideras que no ha sido justificado, puedes iniciar un proceso de reclamación ante las autoridades competentes, como el Ministerio de Trabajo o los tribunales laborales.




En caso de que el despido sea declarado como improcedente o nulo, tendrás derecho a una indemnización por despido. Esta indemnización puede variar en función de tu antigüedad en la empresa, tu salario y otras circunstancias particulares de tu caso.

Es importante tener en cuenta que, en algunos casos, es posible llegar a un acuerdo con la empresa para negociar una indemnización más alta a cambio de no emprender acciones legales. En estos casos, es recomendable contar con el asesoramiento de un abogado laboral para asegurarte de que el acuerdo sea justo y beneficioso para ti.

Consejos para ser despedido del trabajo

1. Actitud negativa: Mantén una actitud negativa en tu lugar de trabajo, mostrando desinterés en tus tareas y en colaborar con tus compañeros.

2. Incumplimiento de normas: Ignora las políticas y procedimientos de la empresa, llega tarde con frecuencia y no cumplas con tus responsabilidades.

3. Mala relación con los compañeros: Crea conflictos constantes con tus compañeros de trabajo, evita la comunicación y genera un ambiente tenso en el equipo.

4. Bajo rendimiento: No cumplas con los objetivos establecidos, entrega trabajos de mala calidad y no muestres interés en mejorar tu desempeño.

5. Ausencias injustificadas: Falta al trabajo sin justificación, acumulando faltas injustificadas y afectando la productividad del equipo.

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6. Falta de compromiso: Muestra desinterés en los proyectos de la empresa, no te involucres en iniciativas importantes y demuestra falta de compromiso.

Recuerda que estos consejos son contraproducentes y pueden afectar tu reputación profesional a largo plazo. Es importante mantener una actitud profesional y comprometida en el trabajo para asegurar un buen desempeño laboral.

Calcula tu indemnización por despido

Si has sido despedido de tu trabajo, es importante que conozcas tus derechos y la indemnización que te corresponde. Para calcular tu indemnización por despido, debes tener en cuenta varios factores:

1. **Tipo de despido:** Dependiendo de si el despido es improcedente, objetivo o disciplinario, la indemnización será diferente. En el caso de un despido improcedente, la indemnización suele ser de 33 días por año trabajado, con un máximo de 24 mensualidades. En un despido objetivo, la indemnización es de 20 días por año trabajado, con un máximo de 12 mensualidades. Y en un despido disciplinario, la indemnización puede ser nula.

2. **Antigüedad:** La antigüedad en la empresa también influye en la cantidad de la indemnización. A mayor antigüedad, mayor será la cantidad a recibir.

3. **Salario:** El salario que tenías en el momento del despido también es un factor importante para calcular la indemnización. Se suele tener en cuenta el salario bruto anual.

Para calcular tu indemnización por despido, puedes utilizar una calculadora online o acudir a un abogado laboralista que te ayude a determinar la cantidad exacta que te corresponde.

Recuerda que es importante conocer tus derechos en caso de despido y asegurarte de que estén siendo respetados. Si consideras que has sido despedido de forma injusta, puedes recurrir a la vía judicial para reclamar una indemnización justa.

Formas de justificar un despido objetivo

1. Falta de adaptación del trabajador al puesto de trabajo: Si el trabajador no cumple con las funciones y responsabilidades del puesto para el que fue contratado, el empleador puede justificar un despido objetivo.

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2. Causas económicas, técnicas, organizativas o de producción: Si la empresa atraviesa dificultades económicas, cambios tecnológicos que afectan la organización o una reestructuración en la producción, el despido objetivo puede ser justificado.

3. Incumplimiento grave y reiterado de obligaciones laborales: Si el trabajador ha cometido faltas graves de forma reiterada, como el absentismo injustificado o el incumplimiento de horarios, el despido objetivo puede estar justificado.

4. Ineptitud sobrevenida del trabajador: Si el trabajador pierde las habilidades necesarias para desempeñar su trabajo debido a causas ajenas a la empresa, como una enfermedad o un accidente, el despido objetivo puede ser una opción válida.

5. Procedimiento legal: Para justificar un despido objetivo, es necesario seguir un procedimiento legal establecido en la normativa laboral, que incluye notificar al trabajador con antelación y ofrecerle una indemnización según lo establecido en el Estatuto de los Trabajadores.

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